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clearCada brújula está basada en un gráfico de 9 puntas para presentar las diferentes propiedades organolépticas, valoradas en intensidad del 0 al 5.
Otro sabor que caracteriza a las cervezas es su amargor. La intensidad de amargor se define como el grado de percepción amarga en boca, es decir, como “gusto básico”.
Esta escala es relativa, donde aproximadamente 2-3 es la intensidad moderada de una lager convencional (25-30 BU), y a partir de ese valor las cervezas pueden ser más suaves o intensas.
El color se liga al grado en cantidad y variedad de las distintas maltas con una escala desde el amarillo pálido/dorado (0-1), hasta el marrón oscuro/negro (4-5), pasando por las gamas de ámbar y cobrizo.
La maltosidad nos permite hacernos una idea de la contribución en sabores aromáticos procedentes de las maltas u otros cereales.
Refleja cierta intensidad de sensaciones y de sabor tales como cereal tostado, el caramelo, el toque ahumado, el café, chocolate, las frutas pasas, los frutos secos, etc. Dependiendo del tipo de cerveza, los matices podrán ser unos u otros, de forma casi exclusiva o mezclados.
En este caso debemos interpretar la escala “maltoso” desde ligero (0-1), moderado (1-2), intenso (2-3), o muy intenso, si el nivel es mayor que 3.
El vector “Licoroso” agrupa las sensaciones aromáticas intensas y secas ligadas al contenido alcohólico. No todos los aromas licorosos son del alcohol etílico habitual, sino también de aromas de acetaldehído, de otros alcoholes superiores y otros volátiles que contribuyen a ese recuerdo a licores.
Son el resultado de un proceso fermentativo intenso en la cerveza, y por lo tanto es relativamente proporcional al contenido alcohólico, el cual solo es perceptible a partir de contenidos superiores (>5,5%) aproximadamente.
El vector afrutado en la brújula orienta sobre el carácter frutal que tiene la cerveza. Representa la intensidad de sabores frutales que genera la fermentación. Normalmente aparecerán notas de frutas blancas como el plátano, la manzana o la pera, pero también sabores frutales que pueden ser añadidos durante el proceso, como el limón, la cereza, flor de la pasión, entre otros.
En este punto debemos interpretar la escala desde ligero (0-1), a moderado (1-2), intenso (2-3) o muy intenso (>3).
La punta de especial de la brújula nos representa características de sabor peculiares donde se incluyen sabores de 4 tipos diferentes. Los sabores de Barrica (coco, vainilla, madera,...), sabores Biológicos (vinagre, heno/cuero,...), sabores a Especias (clavo, pimienta, nuez moscada,...) y el Especial (para incluir cualquier otro sabor puntual como la menta, la zanahoria,...).
Llegando al último vector de la brújula, vemos que representa el punto de acidez de la cerveza. Aunque todas las cervezas son ácidas, la gama se extiende desde aquellas sensaciones normales que equivalen a 0 dentro de la escala, a sensaciones muy intensas (>3), características de las cervezas “sour”.
Otra contribución de los lúpulos son sus aromas. La intensidad aromática se representa como intensidades cítricas y/o frutales, atendiendo a las dos principales familias de sabor que aportan los lúpulos.
Las notas C/Fr recogen sensaciones a flor de azahar, a aromas cítricos, grosella o frutas de hueso como melocotón, albaricoque, mango, ...
Otra contribución de los lúpulos son sus aromas. La intensidad aromática se representa como intensidades florales y/o herbales por un lado, como los aromas a bosque o flores. Las notas F/H recogen sensaciones a rosas, geranio, infusión de plantas, hierbas, etc.