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¿Es la olla de terracota para pan la nueva airfryer? Todo sobre el gadget que busca hacerse un hueco en nuestra cocina
El arte de hornear sin prisa con un objeto artesanal que ha llegado para despertar nuestra pasión por el pan. Convierte tu hogar en un auténtico obrador con la olla de terracota.
En la era de los gadgets que prometen rapidez y audacia, a veces somos nosotros mismos los que demandamos más tiempo. Quizás porque la cocina es un ritual en sí mismo, sobre todo si lo que tenemos entre manos es una masa con tanto por explorar como la del pan. Todo un arte culinario que parece haber encontrado en el horno de terracota el lugar perfecto donde desarrollarse.
También para adentrarse en los sabores más auténticos del pan y las texturas que nunca pensamos que podríamos obtener desde casa: con una apetecible miga jugosa y una corteza tan firme como tostada.
Un objeto artesano que promete cambiar nuestros momentos en la cocina, con un diseño tan funcional como inspirador. Redescubrimos el arte de hornear sin prisa con la olla de terracota, la nueva sensación entre los apasionados de las masas.
Todo lo que necesitas saber sobre la olla terracota: ventajas y características
La olla de terracota es el nuevo objeto de deseo de los más cocinitas. Aúna la creatividad de la cerámica con un diseño muy bien pensado, compuesto por un plato de base y una cúpula con orificios de ventilación. Es, en definitiva, una adaptación pequeña y casera de los hornos de piedra que, desde la antigüedad, han elaborado las más deliciosas masas al calor del fuego.
Un invento artesano que la firma Mica, cuyo nombre proviene del término "mica panis" ("miga de pan" en latín), ha convertido en su sello después de 37 años dedicados al oficio de la cerámica. Pero que también ha encontrado su lugar en otros espacios como los estantes de Zara Home, en parte responsable de su éxito actual.
Y aunque su uso parezca destinado solo a los más curiosos y pacientes, lo cierto es que esta olla para hornear pan nos ofrece muchas ventajas frente a los fogones:
- Retiene y distribuye el calor de manera uniforme, por lo que no tenemos que preocuparnos por dar la vuelta a nuestro pan si nuestro horno ejerce más calor por una zona que por otra.
- Puede soportar unos 250ºC, lo que es perfecto para elaborar panes con resultados de obrador sin salir de casa.
- Conserva muy bien el vapor de la cocción: esto nos ayuda a mantener la humedad adecuada para conseguir una miga suave e hidratada.
- También nos permite obtener una corteza tostada y crujiente gracias a la superficie porosa de la cerámica.
- Se puede limpiar de manera muy fácil, como haríamos al fregar cualquier cuenco o plato.
- Es la excusa perfecta para animarnos a descubrir el amplísimo universo del pan, probar con diferentes recetas y, por supuesto, tener siempre listo el que más nos gusta.
Los tipos de panes que se pueden hacer con la olla terracota
No existe una receta concreta para usar en la olla de terracota. Sin embargo, hay ciertos panes a los que se les puede sacar mucho más partido, como son las hogazas rústicas y de elaboración tradicional.
Uno de los mejores aspectos de la olla de terracota es su forma de cocinar la miga de los panes. Una muy buena excusa para ponernos a experimentar en casa con la magia de la masa madre. Es más, el toque ácido que obtendremos en este tipo de pan es perfecto para tostas de estilo italiano, con un toque de aceite, tomate seco o un regalo culinario como la burrata. Marida la experiencia con las suaves notas afrutadas de Alhambra Especial y disfruta, por partida doble, de todo lo que la fermentación lenta puede ofrecerte.
Y aunque en esta olla tienen cabida todos los panes -e incluso la focaccia, si nos ponemos creativos-, nada como los clásicos para obtener el mejor resultado. Recetas como el pan de moño, el pan gallego, las barras rústicas o los panes de harinas antiguas, como la espelta o el centeno, van a la perfección.
Quizás sí que es recomendable evitar los panes más refinados y de sabores que van hacia lo dulce, como el pan francés o las recetas de estilo brioche, que no requieren una corteza tan firme como la que ofrece esta olla.
En cualquier caso, siempre es interesante tener a mano una guía de panes de confianza que nos pueda ayudar con las proporciones y las recetas. Por ejemplo, como los libros de Daniel Jordà, la biblia de los panes rústicos 'Pan de pueblo', de Ibán Yarza, o 'Planeta Pan', de Edu Lavandeira, que también tiene uno de los perfiles más interesantes de TikTok dedicado al arte de las masas.
Consejos y recomendaciones para sacarle todo el partido
La olla de terracota es muy sencilla de usar, pero es mejor seguir algunos pasos para que nuestros panes salgan a la perfección. Por supuesto, es importante ser fiel a los consejos básicos para hacer una buena masa, como mezclar bien los ingredientes con la masa madre, respetar los tiempos de reposado, amasar sin prisa e, incluso, formar el pan y plegar como auténticos expertos.
No obstante, la olla también requiere su proceso de preparación, tal y como indican los fabricantes de Mica. Se debe empezar por un calentamiento previo, donde pondremos el horno a 250ºC e introduciremos la olla limpia y cerrada sobre la parrilla. A continuación, se debe depositar la masa sobre el plato y aprovechar para hacer los característicos cortes sobre el pan con un cutter o una navaja muy afilada.
Con la ayuda de unos guantes, taparemos el pan con la cúpula y lo meteremos de nuevo al horno. Una vez pasen 10 minutos, bajaremos la temperatura a 200ºC sin abrir el horno y, por último, dejaremos hornear el pan durante los 45-50 minutos. Una vez transcurrido este tiempo, solo tenemos que extraer la olla (siempre con guantes), abrirla y dejar que el pan se enfríe. ¿Lo mejor? En apenas unos instantes podrás empezar a soñar con las tostas más deliciosas que te esperan a la mesa con tu propio pan.
Imágenes: Mica
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